El rendimiento y la longevidad de tu tejado dependen en gran medida de la selección de los tipos de base adecuados. La base actúa como una segunda línea de defensa vital que protege tu casa contra la lluvia, el viento, la nieve, el hielo e incluso el fuego. Los códigos de edificación exigen la instalación de capas de base porque repelen eficazmente el agua.
Los materiales para tejados utilizan tres tipos sencillos de subcapa: fieltro saturado de asfalto, asfalto cauchutado y sintético no bituminoso. Cada tipo aporta ventajas únicas basadas en necesidades específicas. Por citar un ejemplo, el contrapiso de fieltro viene en grosores de 15 y 30 libras y resiste el agua, pero no es impermeable. Los contrapisos de asfalto cauchutado funcionan mejor en zonas donde llueve mucho o se forman diques de hielo. Los contrapisos sintéticos son una opción ligera y duradera que resiste los desgarros y los rayos UV.
Este artículo explora los distintos tipos, características y métodos de instalación de las bases de tejado. Aprenderás a elegir la opción adecuada en función de tu clima y el material de la cubierta. La guía también explica por qué se producen fallos en las capas base e incluye recomendaciones de expertos que te ayudarán a tomar decisiones inteligentes para tu proyecto de tejado.

Entender los tres tipos principales de bases de tejado
Elegir los materiales de base adecuados que se ajusten a tus necesidades es crucial para proteger tu tejado. Examinemos tres tipos de bases para tejados y sus características únicas que te ayudarán a hacer la mejor elección.
Base de fieltro: Base orgánica frente a base de fibra de vidrio
El contrapiso de fieltro es una de las soluciones más antiguas del sector de las cubiertas. Los fabricantes lo crean saturando papel o esterilla de fibra de vidrio con asfalto para resistir el agua. Los dos tipos principales se diferencian por el material de su base. El fieltro orgánico procede de una base de celulosa hecha de papel reciclado o serrín. El fieltro a base de fibra de vidrio utiliza en cambio materiales inorgánicos. Ambos tipos sirven para lo mismo, pero los constructores utilizan más a menudo el fieltro de base orgánica.
El fieltro n.º 30 resulta más duradero que el n.º 15, lo que lo convierte en la mejor opción para tejados de pendiente pronunciada. Pero la base de fieltro puede arrugarse cuando se moja, y esto puede impedir que las tejas queden planas.
Asfalto cauchutado: Autoadhesivo y Autosellante
El contrapiso de asfalto cauchutado combina asfalto con polímeros de caucho para crear una barrera impermeable superior. Esta opción de primera calidad tiene un soporte adhesivo con papel antiadherente extraíble que se pega directamente a la cubierta de tu tejado.
La característica más destacada de este material es su capacidad para sellarse alrededor de fijaciones y clavos. Se mantiene impermeable incluso después de la penetración. Las versiones de alta temperatura pueden soportar un calor de hasta 250 °F sin perder fuerza adhesiva, lo que las hace perfectas para tejados metálicos.
La superficie lisa del material ayuda a crear una mejor adherencia de las solapas y elimina las fugas en forma de "boca de pez" que podrían desarrollar otros materiales. Varias capas trabajan juntas para formar una membrana protectora que protege los puntos más vulnerables de tu tejado.
Contrapisos sintéticos: Variantes de Polipropileno y Polietileno
El subsuelo sintético representa la opción más moderna en cubiertas. Consiste principalmente en materiales plásticos laminados de polipropileno o polietileno. Estos productos de ingeniería son sustancialmente más resistentes al desgarro y duraderos que las opciones tradicionales.
El subsuelo sintético pesa cuatro veces menos que el fieltro y cubre mucha más superficie por rollo. Los instaladores hacen menos viajes por la escalera, lo que acelera el proceso de instalación.
Estas opciones sintéticas expulsan el agua en lugar de absorberla como el fieltro. Mantienen su forma sin arrugarse. Además, resisten la formación de moho y pueden soportar la exposición prolongada a los rayos UV durante los retrasos en la construcción.
Pautas de instalación según la inclinación y el material del tejado
La inclinación y los materiales del tejado determinan los procedimientos de instalación adecuados. Seguir las directrices del fabricante proporcionará una protección óptima y mantendrá intacta la cobertura de la garantía.
Cubiertas con poca pendiente: solapamiento de 19 pulgadas para doble cobertura
Los tejados de pendiente baja (inclinación de 2:12 a 4:12) necesitan protección adicional contra las filtraciones de agua. Estos tejados requieren una técnica de instalación de doble capa. El proceso comienza con una tira de base de 19 pulgadas de ancho paralela al alero. A continuación, se colocan encima láminas de 36 pulgadas de ancho, con solapamientos de 19 pulgadas entre las láminas sucesivas. Así se crea una doble capa sobre todo el tejado. El agua escurre más lentamente sobre estas superficies, por lo que este método de solapamiento proporciona una protección sustancialmente mejor.
Cubiertas con pendiente pronunciada: solapamiento y fijación de 2 pulgadas
Los tejados con pendientes de 4:12 y más pronunciadas no necesitan tanto solapamiento. Las capas superiores deben solapar las inferiores al menos 5 cm. El agua escurre más rápido en pendientes más pronunciadas, por lo que este solapamiento mínimo es suficiente para la protección. A pesar de ello, los solapamientos de los extremos necesitan al menos 15 cm donde se unen los rollos. Las hileras adyacentes deben tener sus solapes finales desplazados 1,80 m.
Láminas metálicas de borde: Aleros vs Rastrillos
Los distintos bordes necesitan tratamientos diferentes. El contrapiso debe solapar el borde metálico en los aleros. Esto crea una barrera impermeable que impide que la humedad se filtre por este punto vulnerable. Los rastrillos (bordes inclinados) funcionan de forma diferente: primero se coloca la capa de base y luego se superpone el borde metálico. Esta configuración crea un efecto de cuenca que aleja el agua de la cubierta del tejado.
Métodos de Fijación: Grapas vs Tapones de Plástico
El tiempo que transcurre antes de la instalación final de la cubierta determina la elección de la grapa. Las grapas estándar funcionan bien para la instalación de tejas en el mismo día. Los clavos con capuchón de plástico o las grapas con capuchón ofrecen mayor capacidad de sujeción cuando la capa de base permanece expuesta más tiempo. Estos capuchones distribuyen la presión uniformemente y resisten mejor el levantamiento por viento que las grapas normales. La mayoría de los trabajos requieren una separación de 15 cm en los solapes y de 30 cm en las zonas de campo. Las zonas de viento fuerte requieren una separación menor entre grapas.

Causas comunes de fallo del contrapiso
Los daños en el tejado y las reparaciones costosas suelen ser consecuencia de un subsuelo defectuoso. Los materiales de calidad pueden estropearse demasiado pronto en determinadas condiciones.
Fieltro de calidad inferior: Cuestiones de conformidad con ASTM
Los problemas de calidad afectan a muchos contrapisos de fieltro disponibles hoy en día. Los productos etiquetados como "contrapisos" o "de 15 libras" no cumplen las normas ASTM, lo que da lugar a materiales que no tienen suficiente saturación. Estos productos no conformes absorben agua con facilidad y fallan prematuramente. La absorción de agua hace que el producto se expanda y se arrugue, mostrándose a través de las tejas de asfalto más finas. La calidad del contrapiso debe cumplir las especificaciones ASTM D226 y ASTM D4869 para proteger la cubierta del tejado de los daños causados por el agua.
Exposición a los rayos UV y pérdida de volátiles en el asfalto
Los compuestos volátiles del contrapiso asfáltico se evaporan constantemente, sobre todo cuando hay exposición al calor. El contrapiso se vuelve frágil y absorbe humedad a medida que estos compuestos desaparecen. Todos los tipos de contrapisos se deterioran a distinta velocidad bajo una exposición prolongada a los rayos UV. Los rayos UV hacen que los contrapisos sintéticos se vuelvan quebradizos y liberen compuestos orgánicos volátiles (COV). El fieltro asfáltico se descompone rápidamente bajo los rayos UV, por lo que los instaladores deben cubrirlo justo después de la instalación.
Instalación incorrecta y daños causados por el tráfico peatonal
La mano de obra deficiente destaca como una de las principales razones por las que los contrapisos fallan antes de tiempo. La manipulación descuidada durante la instalación desgarra, arruga o arruina por completo los delicados materiales de los contrapisos. El tráfico peatonal intenso desgasta mucho los tejados residenciales. Las capas protectoras del tejado se debilitan a medida que la presión crea con el tiempo tejas agrietadas o rotas. El movimiento cerca de valles y bordes puede alterar las capas impermeabilizantes y aumentar el riesgo de que entre agua.
Mechas y trampas de humedad en el subsuelo sintético
Los contrapisos sintéticos ofrecen ventajas, pero conllevan sus propios retos. La Asociación Nacional de Contratistas de Tejados informa de que los problemas de humedad de los productos sintéticos superan a los de los contrapisos de fieltro. Los problemas de humedad surgen cuando los instaladores utilizan técnicas apropiadas para el fieltro en lugar de seguir las instrucciones específicas del fabricante. Los contrapisos sintéticos actúan como una barrera de vapor que puede atrapar la humedad sin una ventilación adecuada, lo que provoca moho y putrefacción de la madera.
Cómo elegir la base adecuada para tu tejado
Elegir bien base del tejado necesita que pienses en varios factores que protegerán tu casa. Veamos qué ayuda a que esta decisión sea más fácil.
Adecuación climática: condiciones de calor, frío y humedad
Tu entorno local desempeña un papel importante a la hora de elegir el mejor subsuelo. Los contrapisos sintéticos funcionan muy bien en climas cálidos y áridos como Arizona, porque resisten mejor el calor y los rayos UV. El asfalto cauchutado es la mejor opción para las regiones frías y nevadas. Se mantiene flexible cuando cambian las temperaturas y crea barreras impermeables contra los diques de hielo. Los contrapisos impermeables resultan cruciales en zonas de lluvias torrenciales para detener los daños causados por la humedad.
Compatibilidad con materiales de tejado: Tejas, Metal, Cedro
Cada material de cubierta necesita unas características específicas del contrapiso. La mayoría de los tipos de subcapa funcionan bien con las tejas de asfalto, aunque las sintéticas son las que mejores resultados dan. Los tejados metálicos necesitan capas de base que soporten altas temperaturas -algunos productos funcionan hasta a 265 °F- y eviten la condensación. Las tejas de cedro necesitan espacio debajo para que salga la humedad atrapada. La mejor configuración utiliza una membrana permeable al vapor con una estera de ventilación.
Coste vs Rendimiento: Fieltro vs Sintético vs Engomado
Los contrapisos de fieltro son los más baratos, pero no duran tanto. Los productos sintéticos alcanzan el punto óptimo entre precio y calidad. Resisten bien los desgarros, protegen de los rayos UV y repelen la humedad. El asfalto engomado es el más caro, pero te ofrece la mejor impermeabilización y se sella alrededor de las fijaciones.
Consideraciones sobre el código de edificación y la garantía
Los códigos de edificación dicen que debes utilizar un contrapiso en tu sistema de cubierta. El Código Residencial Internacional exige materiales de base que cumplan normas ASTM específicas (D226, D1970, D4869 o D6757). Los fabricantes de tejas a menudo exigen la instalación correcta del contrapiso para la cobertura de la garantía. Las zonas de mucho viento pueden necesitar métodos de instalación especiales o membranas autoadhesivas en todo el tejado.
Conclusión
El éxito de tu proyecto de techado depende en gran medida de la elección de la capa base adecuada. Este artículo desglosa tres opciones principales de base que funcionan mejor en diferentes situaciones. El contrapiso de fieltro es una opción económica con resultados probados durante décadas, aunque no soporta bien la humedad. El asfalto engomado cuesta más, pero impermeabiliza mejor y se sella alrededor de las fijaciones. El contrapiso sintético, ligero y resistente a los desgarros, proporciona una mayor protección contra los rayos UV cuando la construcción se retrasa.
La forma en que instales el contrapiso afecta mucho a su eficacia. Necesitarás doble cobertura con solapes de 19 pulgadas para tejados de pendiente baja. Los tejados más inclinados funcionan bien con solapamientos de 5 cm. Los clavos de plástico protegen mejor que las grapas normales cuando el contrapiso debe estar expuesto más tiempo.
Los fallos de los contrapisos se producen por varias razones. Los materiales que no cumplen las normas ASTM absorben demasiada humedad. Los rayos UV dañan todo tipo de contrapisos, especialmente los de fieltro. Una mala instalación y demasiado tránsito peatonal pueden debilitar todo el sistema de tu tejado.
El clima desempeña un papel importante a la hora de elegir tu base. Las opciones sintéticas funcionan muy bien en zonas cálidas, mientras que el asfalto recubierto de caucho soporta mejor las regiones frías y los diques de hielo. Las necesidades de tu material de cubierta también son importantes: los tejados metálicos necesitan una capa base resistente al calor, y las tejas de cedro necesitan algo transpirable.
Los códigos de construcción y las garantías del fabricante deben guiar tu elección final. Estos requisitos mantienen tu tejado seguro y protegido por la garantía si aparecen problemas. Acertar en estos detalles protegerá tu inversión y te dará tranquilidad durante años en caso de mal tiempo.
Preguntas frecuentes
Q1. ¿Cuáles son los principales tipos de bases para tejados? Hay tres tipos principales de subcapa para tejados: fieltro (saturado de asfalto), asfalto recubierto de caucho y sintético (no bituminoso). Cada tipo ofrece ventajas distintas y es adecuado para diversas situaciones de techado.
Q2. ¿Cómo afecta el clima a la elección del subsuelo? El clima desempeña un papel crucial a la hora de elegir un contrapiso. Los contrapisos sintéticos funcionan bien en climas cálidos y áridos por su resistencia al calor. El asfalto cauchutado es ideal para las regiones frías propensas a los diques de hielo, mientras que los contrapisos impermeables son esenciales en zonas con lluvias torrenciales.
Q3. ¿Es mejor el subsuelo sintético que el fieltro? El subsuelo sintético suele ser más duradero, resistente al desgarro y a la intemperie que el fieltro. También es más ligero y cubre más superficie por rollo. Sin embargo, el fieltro sigue siendo una opción rentable con una larga historia de uso en el sector de las cubiertas.
Q4. ¿Cómo debe instalarse el contrapiso en las distintas pendientes de cubierta? Para tejados de pendiente baja (inclinación de 2:12 a 4:12), utiliza una instalación de doble capa con solapamientos de 19 pulgadas. En pendientes más pronunciadas (4:12 y superiores), basta con un solapamiento de 5 cm. Sigue siempre las directrices del fabricante y los códigos de construcción locales para una instalación correcta.
Q5. ¿Qué factores pueden provocar el fallo del contrapiso? Entre las causas habituales de fallo de los contrapisos están el uso de materiales de calidad inferior que no cumplen las normas ASTM, la exposición prolongada a los rayos UV, la instalación incorrecta, el tránsito excesivo de personas durante la instalación y los problemas de humedad. Elegir materiales de alta calidad y garantizar una instalación adecuada puede ayudar a evitar estos problemas.